Saque su número por favor...
Me he dado cuenta que hasta el cielo tiene precio.
he visto demasiado esos canales de "llame ya" y son iguales a un canal evangélico que estuvo al aire varios años.
"El precio es increíble, no aprovechar esta oferta sería botar su dinero, ¿ cuánto más pagaría por un artículo así? Vamos, tome el teléfono y llame al número que aparece en pantalla."
"Hermano, no bote su platita, ganese su entrada al cielo, haga su donación, tome el teléfono y llame al teléfono que aparece en pantalla."
"No puedes hacer eso tony, NO! que doloroso para tu espalda, esos ejercicios abdominales no pueden ser buenos."
"Hermano no puede hacer eso, que doloroso es para el alma andar perdido en las tinieblas, el aceptar tanto libertinaje no puede ser bueno para la humanidad."
"¿Deseas con todas tus ganas tener un abdomen plano y un cuerpo hermoso? pues no dudes en marcar el número que aparece en pantalla y pedir tu ABflex 2000"
"¿Deseas con todo tu corazón que Dios te conceda ese favor? pues no dudes en marcar el número que aparece en pantalla y hacer tu donación, Dios escuchará tus ruegos hermano, porque tu generosidad asi lo ha permitido."
Se venden de la misma manera, aunque son productos distintos. Piden dinero de forma tan convincente que por un momento uno jura que es meter la mano al bolsillo y contar con la plata necesaria para tener la felicidad asegurada de por vida, pero al final son los dos el mismo fraude. Te aseguran un cuerpo perfecto o bien tu pedazo de cielo por una módica suma de dinero que puedes pagar en cuotas o bien al contado y en efectivo. Te hacen creer que entrar al cielo es vía ticket y que la famosa maquinita quemará grasas por tí. Imagina si fuese cierto:
1º Seríamos todos delgados y hermosos.
2º Los ticket de entrada al cielo vendrían firmados por Dios...
he visto demasiado esos canales de "llame ya" y son iguales a un canal evangélico que estuvo al aire varios años.
"El precio es increíble, no aprovechar esta oferta sería botar su dinero, ¿ cuánto más pagaría por un artículo así? Vamos, tome el teléfono y llame al número que aparece en pantalla."
"Hermano, no bote su platita, ganese su entrada al cielo, haga su donación, tome el teléfono y llame al teléfono que aparece en pantalla."
"No puedes hacer eso tony, NO! que doloroso para tu espalda, esos ejercicios abdominales no pueden ser buenos."
"Hermano no puede hacer eso, que doloroso es para el alma andar perdido en las tinieblas, el aceptar tanto libertinaje no puede ser bueno para la humanidad."
"¿Deseas con todas tus ganas tener un abdomen plano y un cuerpo hermoso? pues no dudes en marcar el número que aparece en pantalla y pedir tu ABflex 2000"
"¿Deseas con todo tu corazón que Dios te conceda ese favor? pues no dudes en marcar el número que aparece en pantalla y hacer tu donación, Dios escuchará tus ruegos hermano, porque tu generosidad asi lo ha permitido."
Se venden de la misma manera, aunque son productos distintos. Piden dinero de forma tan convincente que por un momento uno jura que es meter la mano al bolsillo y contar con la plata necesaria para tener la felicidad asegurada de por vida, pero al final son los dos el mismo fraude. Te aseguran un cuerpo perfecto o bien tu pedazo de cielo por una módica suma de dinero que puedes pagar en cuotas o bien al contado y en efectivo. Te hacen creer que entrar al cielo es vía ticket y que la famosa maquinita quemará grasas por tí. Imagina si fuese cierto:
1º Seríamos todos delgados y hermosos.
2º Los ticket de entrada al cielo vendrían firmados por Dios...
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