La marcha de los pingüinos...

Los que no tenían voz, los que fueron subestimados por varios gobiernos, los que aparecen en nuestras mentes como personas irresponsables, inmaduras e incapaces de decir lo que quieren, se han cohesionado al punto de doblarle la mano al gobierno. Han sido capaces de dejar de lado sus corrientes políticas en pro del bien común (podrían aprender de ellos los maduros señores del congreso) han sacrificado sueño y carrete por salir a las calles y por dormir en sus colegios, y lo más importante, nos han dado una gran lección:
Nunca subestimes a tu enemigo, por pequeño que éste parezca.
No es cierto ministro Zilic?...